ARGUMENTO:
Creada por David Shore, “The Good
Doctor” es la adaptación norteamericana de una ficción de Corea del Sur emitida
en 2013, que fue reconocida por su labor de concienciación sobre el autismo.
Está protagonizada por el actor británico Freddie Highmore, que da vida a Shaun
Murphy, un brillante médico con autismo y síndrome de Savant que se une como
cirujano residente a la plantilla del prestigioso San José St. Bonaventure
Hospital, pese a las reticencias de algunos de los profesionales que allí
trabajan. Pero sus excepcionales habilidades médicas y su extraordinaria
memoria le permitirán hacer frente a complicados diagnósticos, refutando ese
escepticismo inicial de sus colegas y suscitando, incluso, algunos celos
profesionales.
AUTISMO Y SÍNDROME DE SAVANT:
El Autismo y síndrome de
Asperger presentan las siguientes características:
- Dificultad para explicar los propios comportamientos y emociones.
- Dificultad para predecir el comportamiento o estado emocional de los demás.
- Problemas para comprender la perspectiva e intenciones de los demás.
- Falta de comprensión de que el comportamiento propio influye en lo que los demás piensan o sienten.
- Problemas con las convenciones sociales.
- Problemas para diferenciar los hechos de la ficción.
El Síndrome de Savant, también conocido
como Síndrome del Sabio, es un concepto amplio que abarca una serie de síntomas cognitivos anómalos que están
relacionados con capacidades mentales
prodigiosas.
RELACIÓN CON LA SERIE:
El médico cirujano protagonista padece de un tipo de autismo. Además el
personaje tiene síndrome de Savant dos patologías
que, a menudo, se presentan combinadas; 1 de cada 10 personas con autismo
tiene, además, síndrome de Savant y alrededor del 50% de las personas con
Savant tienen también autismo.
Shore y los
guionistas confiesan que hicieron una gran cantidad de investigación sobre el
Autismo antes de rodar de modo que pudieran dar al tema un enfoque
realista: “Vimos muchos documentales. Tenemos gente experta con
la que estamos trabajando”. Pero el creador advierte que Shaun es ”un personaje muy específico. No es representativo del autismo “. El autismo puede
afectar
las habilidades motoras de una persona también, lo que podría hacer
que el trabajo de cirujano sea difícil para Shaun, pero Shore dice que “sus habilidades motoras finas
resultarán ser bastante capaces. El verdadero desafío será su
capacidad de comunicación y el trabajo en equipo“.
La serie trabaja con asesores para que su retrato de Shaun
sea lo más realista posible, teniendo en cuenta que, al fin y al cabo, es el
protagonista de una serie de televisión, un
protagonista que, a lo mejor, no habría podido verse representado de esta manera hace unos años. David Shore afirma que “éste es un
personaje que a las cadenas les podría haber dado miedo poner en televisión,
miedo de que no nos identificáramos con él, hace diez años. Creo que el mundo
está mejorando, pese a que hay pruebas de lo contrario. Estamos viendo un
personaje que no estamos acostumbrados a ver en televisión y nos identificamos
con él”.
El tratamiento del Asperger es uno de los puntos
fuertes de 'The Good Doctor', pero su acercamiento fidedigno a este síndrome
también genera algunas dificultades a
la hora de rodar las escenas, como confiesan algunos de sus
actores. Nicholas González, el Dr. Neil Melendez en la ficción, ha confesado lo
complicado que resulta "grabar cuando la otra persona evita el contacto
visual". En este sentido, el actor comenta que "al
principio era complicado interacturar con Shaun, dar las réplicas, porque no
estoy acostumbrado a trabajar así".
Hay críticas que se fijan en que sus síntomas están bien
representados, como que Shaun se retuerza las manos cuando se encuentra en una
situación estresante o que evite el contacto visual directo. Otras apuntan que autistas
con el síndrome de Savant, como él, son un porcentaje bastante bajo de todo el
colectivo, pero que el doctor Murphy se enfrenta a la misma incomprensión
social que otras personas menos inteligentes. Y existen críticas que señalan
que The Good
Doctor puede ayudar a visibilizar a estas personas y a romper los
tabúes que todavía existen sobre ellas.
Otro de los objetivos inclusivos de la serie es instruir al público en relación con las discapacidades sociales que una
persona con autismo tiene. Por esta razón, el personaje de Shaun Murphy carece de
habilidades sociales, falta de empatía e incapacidad para comprender chistes o
asimilar situaciones inesperadas como ser testigo de un asalto en una tienda y
responder cosas que a los ojos de los presentes, parezcan incoherentes.
Por último, con motivo del Día Mundial del Autismo (2 de abril) AXN, uno de lo canales donde se retransmite la serie, ha querido
sumarse a su celebración cambiando su color corporativo del rojo al azul,
apoyando a la concienciación sobre este trastorno en colaboración con la
Confederación Autismo España y emitiendo una pieza en la que Freddie Highmore habla sobre cómo estas personas
pueden llevar una vida normal si reciben la atención adecuada.
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